Búsqueda de tesoros

Sábado a la tarde, termo, mate, jabru, y a recorrer los suburbios, preguntando por autos viejos, charlando con el dueño de alguno que otro fierro vetusto.
Y a veces los tesoros de encuentran más cerca de lo que uno piensa. Esta ver descubrí una cupé Lincoln 40 con motor V12, en venta a 12 cuadras de mi casa. Está para restaurar íntegra, pero es una belleza. Claro que el tipo pide 8 lucas verdes y no tiene un reverendo papel. A otra cosa.
A pocas cuadras de ahí, en la puerta de un taller de electricidad, hermoso Ford Thunderbird, lustroso, impecable, mostruoso. Me puse a hablar con el dueño, Gabriel, y va a ser uno más en nuestos encuentros de Banfield y luego en Olivos. Siguiendo el paseo, a 7 cuadras de casa, un tipo tenía en la vereda 3 autos: un Opel Rekord Olympia 58, muy entero, un Taunus 58 y un Das Kleiner Wunder. El tipo es un compra venta. Apenas empecé a preguntarle de historia, me dí cuenta e que no tenía la más perra idea de nada, sólo quería cobrar 10 lucas por el Opel, 12 por el Taunus (sujetos a restauración total) y ahí me despedí. Luego, pasada por la panadería, facturas, vuelta a casa y a seguir buscando por todos los medios. En alguna parte está eso que busco.